Moscas secas atractoras, una intención…

por José Luis Scrivano

A raíz de una interesante nota  publicada en el Boletín Mosquero por nuestro consocio Hugo Nochteff  titulada “Secas, una aclaración y una perplejidad” despertó mi curiosidad su solicitud en espera de una charla de atractors. De tal forma que al ser invitado a dar una charla en la AAPM  elegí el tema “Moscas Secas Atractoras” para manifestar mi punto de vista al respecto.  Espero, a través de esa charla y esta nota, satisfacer en lo posible y en alguna medida los interrogantes planteados por Hugo. Quisiera compartir con Uds. los conceptos que discutimos aquella noche sobre el tema de las clasificaciones que hacemos de las moscas secas y en particular de los mal llamados atractors.

Difícil resulta tener una visión clara respecto a las clasificaciones  para dividir a las moscas que utilizamos corrientemente, de hecho parece común que pensemos al abrir nuestras cajas que pattern será el más apropiado para luego emplearlo desde nuestro punto de vista. Leemos el agua y según la anatomía del rió colocamos un atractor o una mosca imitadora, si es un pool, un run o un riffle. Me animo a decir que esta forma  nuestra de haber mal interpretado estos conceptos es muy estructurada y hasta categórica. La pesca con mosca ha tenido un desarrollo documentado poco más que envidiable, una enriquecedora historia que nos permite valorar las cosas del pasado lleno de creación, ingenio y esperanza. El empleo y método de mosca seca ha sido desde los comienzos tema de incesantes y minuciosos escritos desde Dame Juliana Berners, Cotton, pasando por Halford, Martson, Fraser, La Brache, Gill, Wulff, Marinaro, y otros.

Me he preguntado por años por qué encasillamos a los diferentes patterns de esta forma? A primera vista parece una pregunta sin sentido pero pensándolo en profundidad no lo es. Cuántas veces los pescadores pensamos en verdad cómo la trucha verá una de nuestras moscas, cómo la interpretará? Datus Proper escribió “What the trout say?” y qué dice la trucha? Parece una idea descabellada intentar pensar cómo interpretará la trucha nuestras moscas, tal vez no lo sea y estemos en el camino correcto?. Esta práctica puede ser muy interesante, reveladora y didáctica. Al fin y al cabo un pescador con mosca nunca desecha la cortesía de un nuevo desafío, una visión resignada de nosotros no sería prudente. Esto les puede parecer una frase humanista y quizás lo sea pero teniendo en cuenta que “pocos hombres pueden ser felices si no odian a algún otro hombre”, dijo Bernard Russel,  lo que diferencia al humano de los animales es que -paradoja- los humanos no son humanistas y, más allá de todo aquello de ser la “Corona de la Creación”, nos la pasamos todo el tiempo buscando ser destronados, abdicados, guillotinados, depuestos. En materia de léxico, sé que algunos se sienten molestos por la utilización que otros hacen de expresiones inglesas. Por tales motivos se han traducido y hasta inventado palabras tan solemnes y pomposas como “atractoras, impresionistas, imitadoras etc”. Si alguien me propusiera llamarlas “moscas secas a secas” aceptaría con gusto, pero sé que es imposible que la idea prospere.

Cierto es que con el correr de los años los pescadores han formado grupos de moscas que funcionan bien en diferentes situaciones. Muchas de ellas se parecen a insectos reales y podemos demostrar su efectividad debido a esta característica. Al mismo tiempo existe otra categoría de moscas que no imitan nada, no se parecen en nada a los insectos reales y que en ciertos momentos y de acuerdo como se las pesque son notablemente más exitosas.

En general a los atractors se los acusa de no imitar nada en particular y de pescar porque las truchas los confunden con algo grande, voluminoso, siendo que imitan algo comestible para las truchas sin que nosotros los sepamos.

Hay que tener cuidado con los atractors porque a lo mejor no son tan atractors siendo que la trucha los toma porque los reconoce como alimento que acostumbradamente ve pasar.

Los catalogamos por el simple hecho de ubicarlos en algún lugar, los separamos para un orden de pensamiento, pero lo que las truchas dicen…

Un atractor es una mosca fácil de ver para el pez como para el pescador, una mosca más sencilla de pescar porque es más voluminosa que nos permite pescar cómodamente en aguas complicadas, correntosas; que se ve bien a distancia, que flota mejor. Tengan en cuenta que la mayoría de las moscas que pescan en aguas rápidas se las llama atractors, es decir que es más un estilo de mosca para un determinado tipo de aguas que fue diseñada no como atractor sino para cumplir una función específica.

Con seguridad entiendo que cuando Lee Wulff creó la Royal Gulff no pensó en un atractor, diseño el pattern  con calf  para el ala porque el material es fuerte y duradero además se veía muy bien en las agitadas corrientes de los ríos de estado de New York.

Cualquier mosca puede ser un atractor en determinado momento, no hay que encasillarlos y pensar que un atractor es una mosca grande y peluda.

Podemos usar cualquier mosca como atractor cuando las truchas no están subiendo y de hecho van a subir a tomarla y, esto no cataloga a una adams como atractor. Vale decir que si peinamos un run con una adams funcionará perfectamente. En realidad cualquier mosca seca funciona como atractor cuando no hay una eclosión o cuando las truchas no están subiendo.

Muchos pescadores tienen una idea equivocada que en condiciones donde las truchas no están subiendo peinan con un atractor y suben, si peinan con una mosca común no lo hacen, esto no es así

“Un atractor es la intención de una mosca en el agua”.

Cualquier mosca que esté pescando el agua cumple con la función de atraer a la trucha.

Como punta de lanza yo podría comenzar pescando un run con una mosca de determinado tamaño porque en el pasado ha funcionado bien, si funciona continúo así, de no ser así no tiene sentido seguir torturando el sector y hay que probar otras moscas. Muchas veces ocurre que un runs rápidos las truchas se alimentan de insectos pequeños y una mosca grande no funciona. Ocurre que hay moscas que son difíciles de manejar en ciertos lugares como en un run rápido pero que pescan muy bien, en este tipo de aguas una pequeña adams puede ser mortal aunque nosotros no veamos la presencia de mayflies alados, pero las truchas la detectan perfectamente. Creo que el pescador se encasilla en pescar ciertas moscas en determinado tipo de aguas y esta cometiendo un error. Por eso digo que el atractor es la intención de la mosca en el agua.

Muchas moscas han sido diseñadas más para cumplir una función que para agradar al pez, tienen el hackle dispuesto de determinada forma para que floten mejor, se utiliza un material específico para que duren más, para que sostengan mejor al anzuelo, son más visibles.

Las truchas tienen comportamientos diferentes independientemente del agua donde viven, las truchas se mueven. Hay truchas que suben a moscas grandes otros suben a moscas pequeñas porque se sienten más cómodas y están acostumbradas a comer determinado alimento porque se sienten más seguras, a las truchas no les gustan las sorpresas. Este tipo de comportamientos hay que conocerlos bien porque forman parte del éxito.

Me ha ocurrido en muchas ocasiones durante una eclosión de mayflies con las truchas aparentemente selectivas no tomar ninguna imitación que yo ponía de acuerdo a color y tamaño del insecto. Cambiar de pattern dos o tres veces y no tener respuesta alguna. Al colocar uno de estos “mal llamados atractors” comenzaban a comerlos unos tras otro. En principio pensé que la trucha lo había diferenciado del resto, que lo había visto mejor como cuando estamos pescando en una eclosión muy avanzada y la trucha esta comiendo en un pool y todos los insectos son de colores neutros y nuestra mosca es igual a todo lo que está en el agua y pasa desapercibido a la vista de la trucha. Pero no era así, lo que ocurría era que la imitación que yo creía correcta no era buena, éstas moscas que supuestamente no se parecen en nada a los naturales sí, y esto es porque tal vez la trucha desde abajo busca los puntos de presión, de contacto por apoyar mas cantidad de material en el agua lo que en otras moscas falla en este caso los mal llamados atractors lo hacen muy bien.

Un ejemplo que resulta muy gráfico es por ejemplo pescando en lagos no ver la presencia de truchas alimentándose colocar una tarántula y suben a tomarla con decisión; también es muy común ver a las truchas alimentarse de escarabajos verdes metalizados habitantes de muchos lagos del sur, colocar un bomber  y las truchas lo toman perfectamente. Que yo sepa un bomber se parece nada más que a un bomber  y mucho menos a un escarabajo. Entonces, ¿qué tan atractors o qué tan imitadores?

Las moscas desde abajo

He interpelado en todo tipo de lugares a mosqueros, siendo sincero los he aburrido preguntando por qué, por qué y por qué?. Todavía suenan en mis oídos muchas teorías algo rígidas y faltas de sustento lógico que cargan en sus espaldas muchos pescadores, tales como: “una trucha puede rechazar una mosca artificial por la cantidad de patas que ve pero no se incomoda por el anzuelo; las truchas no ven los colores; que no ven a distancia; que su visión es muy reducida del mundo exterior; que no comen en aguas turbias; que por ser el agua donde vive la trucha muy cristalina las moscas se ven igual dentro que fuera de ella” y tantas otras cosas que provocan aún más fracasos y desconcierto.

Hasta aproximadamente mediados de la década de 1980 teníamos una idea acabada de la ventana visual y una generalizada aceptación que los salmónidos poseían visión de los colores.

En los últimos tiempos se han publicado esclarecedores e interesantes trabajos -los que no dejan de asombrarme- sobre la visión y otras facultades sensoriales que condicionan a estos fantásticos peces. A decir verdad estas publicaciones estimularon mi curiosidad sobre los antecedentes evolutivos de actos tan especializados como la percepción de la forma y el movimiento; el color; la visión binocular; el campo visual y la interrelación con otros sentidos tanto o más importantes que hacen a la conducta de los salmónidos.

Mis prácticas en el río eran cada vez más acostumbradas respecto de cómo la trucha interpretaba mis moscas, sus diferencias, tamaño, forma, color, lugares, etc., y estos ensayos fueron concluyentes y esclarecedores cuando culminé probando diferentes moscas en una pileta de natación y acepté sin rodeos que las moscas vistas desde abajo, desde el mundo donde la trucha se desenvuelve -no vistas desde arriba o de costado como lo hacemos siempre- se ven bastante diferentes a cuando están fuera de ella.

Una Royal Gulff  parece una ninfa haciendo su paso evolutivo a adulto, ese cuerpo partido, oscuro y las alas blancas imitan muy bien a un emergente, de aquí muy probablemente su efectividad en hatchs de mayflies en progreso.

Un bomber en tamaño # 8  al ser traccionado aumenta su silueta a un tamaño por lo menos # 4 a causa del movimeinto.

Al patinar una spider en un pool vemos a las truchas quedarse cortas o pasarse de largo para atraparla, desde abajo se puede advertir una doble silueta y la trucha no sabe cuál es la parte real a causa del movimiento.

Ocurre que los atractors en general tienen abundante material, por ejemplo las Tarántulas, Humpys, Goddard Caddis, Sofa Pillow Improved, etc., presentan muchos puntos de contacto, puntos de presión y es por esta causa la efectividad de este tipo de moscas, en realidad imitan de mejor manera que otros patterns un alimento.

“…en este mundo traidor, nada es verdad ni es mentira, todo es cuestión del color del cristal con que se mira…”

Estas moscas deben su efectividad a tres características: tamaño, movimiento y color, de tal forma que no es raro que una trucha salga a tomar una variant en tamaño # 10 que en nada se parece a la eclosión que se presenta, la seca grande se ha diferenciado del entorno, ha llamado la atención y la trucha después de todo no puede resistir la tentación de abrir su boca a cada bocado que se pone a su alcance, “pero tiene que verlo”.

En referencia al color es a las otras dos características el de menor importancia. El color es algo “cultural” por ende la trucha no sabe que es negro, amarillo o verde pero sí los distingue claramente. En el mundo de la trucha existen infinidad de colores y reflejos que está acostumbrada a ver. Lo importante es el “contraste” porque la trucha para comer mira hacia arriba y contrasta contra el cielo o mira hacia abajo y contrasta contra el fondo. En consecuencia Lo que tenemos que hacer es adecuar el color de nuestras moscas respecto a la luz ambiente y a las características del fondo para contrastar y lograr que las vea.     

Acerca de la selectividad

La selectividad ha sido siempre un tema polémico lleno de interrogantes y muy confuso. Muchos autores desde distintos ángulos han tratado de develar este dudoso fenómeno dando todo tipo de explicaciones y experiencias intentando despejar dudas al respecto. Hago hincapié en  la obra de Swisher y Richards “The Selective Trout” en donde tratan el tema de forma minuciosa mostrando diferentes patterns creados por ellos para pescar efectivamente ante truchas selectivas, es más en un capítulo cuestionan las Torax Flies de Art Flick -excelentes moscas- de no ser lo indicado para tan complejo problema.

Mi experiencia dice que las truchas son selectivas a la presentación del pattern y no al pattern en si mismo, es decir a la forma que nosotros pasamos la mosca. Recuerdo algunos conceptos de una publicación de Art Lee donde dice que los devotos del “matching the hatch” se la pasan cortando tippets, haciendo nudos, cambiando patterns  perdiendo así gran parte de la pesca, intentando poner la mosca correcta, en el momento correcto y en el lugar correcto. Esta es una excelente descripción de lo que no hay que hacer.

Hay que pescar con confianza que si pasamos bien la mosca tendremos éxito. En los sectores de pesca y devolución nos encontramos con truchas muy selectivas, generalmente no es por un problema natural sino es porque han sido pescadas varias veces, de tal forma que en realidad se tornan selectivas a lo que hacemos los pescadores, hacia el leader, hacia como navega la mosca atada al tippet, no tanto al pattern sino a como se le presenta y a las cosas que nosotros no podemos evitar.

La trucha se acostumbra a ver el tippet y lo reconoce como un peligro y este es nuestro fin, indudablemente está acostumbrada a lo que le hace daño. Cuando pesco siempre miro atentamente como deriva mi mosca y como lo hacen los mayflies existiendo diferencias notables. Los mayflies derivan con el tórax y cabeza hacia arriba a diferencia de nuestras moscas que en muchas ocasiones lo hacen con la cola hacia arriba o algo de costado, además las moscas son más pesadas.  Es imposible que nuestras moscas deriven a la misma velocidad que los insectos.

El pescador debe aprender a combatir la selectividad hacia el propio pescador, no haciendo lo acostumbrado, es decir cambiando las técnicas de pesca usuales, no torturando los lugares con una misma mosca porque deja de ser efectiva. Entonces cuidado con la selectividad hacia lo que los pescadores hacen. No tanto con las truchas que se ponen selectivas para comer determinados insectos en determinadas ocasiones porque esto ocurre en algunos momentos de la temporada en que hay abundancia de insectos, pero si hacemos las cosas bien pescamos perfectamente. Las truchas buscan límites cómodos para comer, por ejemplo eligen la velocidad en la deriva o la posición de la mosca y es nuestro fin.

La trucha que es selectiva hacia lo que hacen los pescadores es la más difícil de pescar.

Las Moscas

Si bien no me parece adecuado encuadrar las moscas según los lugares quisiera comentarles sin ser categórico cuáles y cómo entiendo resultan muy eficientes según mi experiencia.

En general el los pools me gustan las Spiders y Variants que son moscas que pisan muy liviano. Las Spiders son la efectividad del movimiento porque no tenemos prácticamente mosca, trabaja sobre las puntas de los hackles rayando el agua. Las Variants se mueven muy bien patinando sobre la cola y el hackle mostrando una silueta muy atractiva, también son verdaderamente efectivas patinadas en correderas lentas. Todo tipo de hormigas y tarántulas porque muestran una silueta bien recortada y sólida. En pools y lagos a diferencia de sectores de aguas rápidas hay que construirlas con poca densidad de material y algunas patas en tamaños # 8 y # 10. En lagos he experimentado muy buenos resultados con Variants, moscas grandes Españolas construidas con el ala principal de pato blanco, hackle y cola de Gallo de la Sierra de León, bombers traccionados a tirones regulares con la mano de la línea son excelentes, Brown Bomber, Green Machine, Buck Bug Grizzly.

Pequeñas Royal Wulff, Stimulators y Adams Irresistibles me gustan como moscas de uso generalista, son muy efectivas en todo tipo de lugares del río, inclusive las utilizo con muy buenos resultados en hacths de mayflies. Para pockets sin duda son inmejorables las tarántulas tradicionales o de foam, es notable con la vivacidad que se mueven girando con movimientos erráticos y por cierto como a nosotros nos parecen un bicho evidentemente a las truchas también. Hay que aumentar la densidad del material y la cantidad de hackle para que se sostengan mejor en rápidas corrientes. Humpys y Goddard Caddis son moscas multipropósito andan muy bien en riffles, correderas y en las entradas de los pools.

Las  Down Winged Dry Flies representadas por la serie de las Trudes las prefiero en correderas lentas sobre todo en lugares sombreados donde abunda la vegetación y por ende las caddis. Cuando hay buena luz ambiente prefiero las Trudes tradicionales pero para última hora hago una modificación con alas marrones y negras.  La serie de las Wulffs siempre han sido excelentes en aguas muy correntosas, White Wulff, Royal Wulff, Grizzly Gulff las que utilizabamos mucho en lugares como el Río Traful,  pero con el tiempo las hemos ido sustituyendo por moscas de foam como Chernobyls  y Tarántulas. El foam tiene una cualidad indiscutible “flota más elevado”, son moscas fáciles y rápidas de construir y prácticamente no es necesario engrasarlas.

Bueno, después de tanta conversación  y terminología compleja, espero no haberlos  aburrido, y que la forma poco habitual de ver a estas moscas que no imitan nada en particular les sirva para renovar sus concepciones. De todo lo dicho se desprende que sólo los pescadores lograremos obtener resultados satisfactorios mediante una visión más amplia a la hora de observar y catalogar las moscas que utilizamos, que incluya lo que nuestra experiencia dice que “la trucha dice”..

Bibliografía

Marcelo Morales; Charlas, Distintas Publicaciones.
Julio Gilardi; Manual de Atado de Moscas, 1997.
Jhon Goddard; Jhon Goddard’s Trout Fishing Techniques, 1996.
Lee Wulff; Trout on a Fly, 1986.
Art Lee; Fishing Dry Flies for Trout on Rivers and Streams, 1982.
Art Flick;. New Streamside Guide to Naturls and their Imitations, 1969.
Doug Swisher and Carl Richards; The Selective Trout, 1965.
Leonard Wrihgt; Fishing the Dry Fly as a Living Insect, an Unortodox Method, 1972.

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